Trump también ha promovido una cuenta de inversión para todos los niños nacidos entre 2025 y 2029, con una aportación inicial de $1,000 por parte del gobierno.
Una nueva propuesta legislativa del senador Josh Hawley, respaldada por el presidente Donald Trump, busca entregar cheques de reembolso de al menos $600 a millones de estadounidenses, financiados con los ingresos obtenidos por aranceles a productos importados.
La medida plantea un crédito fiscal reembolsable que beneficiaría tanto a adultos como a menores dependientes, y se aplicaría a lo largo de este año si obtiene el visto bueno del Congreso. El monto base sería de $600, pero podría aumentar si la recaudación por aranceles supera las expectativas. En contraste, se reduciría en un 5 % para contribuyentes con ingresos superiores a ciertos umbrales: $150,000 para parejas, $112,500 para jefes de hogar y $75,000 para individuos.
Según Hawley, el objetivo es que las familias trabajadoras reciban directamente parte de los recursos generados por la política comercial estadounidense. Desde que se implementaron los aranceles bajo la administración Trump, el gobierno ha recaudado cerca de $100,000 millones, y se proyecta que la cifra alcance los $300,000 millones anuales en el corto plazo. Solo en junio, la recaudación fue de $27,000 millones, $4,000 millones más que el mes anterior.
La idea no es completamente nueva. En febrero, Trump había sugerido usar parte de los ahorros derivados del llamado Departamento de Eficiencia Gubernamental, una iniciativa dirigida por Elon Musk, para emitir cheques de hasta $5,000 por hogar. Aquella propuesta, sin embargo, no prosperó en el Congreso.
El nuevo plan, aunque atractivo para muchas familias, despierta preocupación entre algunos economistas que temen un repunte inflacionario. Recuerdan que los cheques de estímulo durante la pandemia inyectaron más de $800,000 millones en la economía y fueron uno de los factores que impulsaron la inflación a niveles no vistos en más de cuatro décadas.
En paralelo, Trump también ha promovido una cuenta de inversión para todos los niños nacidos entre 2025 y 2029, con una aportación inicial de $1,000 por parte del gobierno. Los padres podrían añadir hasta $5,000 anuales, con rendimientos ligados a fondos indexados. Aunque busca fomentar el ahorro desde temprana edad, algunos expertos consideran que debería ofrecer más opciones conservadoras.
Con una campaña electoral en el horizonte, las propuestas económicas de Trump apuntan a poner dinero directamente en los bolsillos de los votantes. Resta ver si el Congreso aprueba los cheques y cómo impactará esta medida en el panorama económico general.



