El USS Gravely reforzará la seguridad nacional interceptando traficantes de drogas en el mar y colaborando con el Departamento de Seguridad Nacional y la Patrulla Fronteriza de EE. UU.
El destructor de misiles guiados USS Gravely, de la clase Arleigh Burke, ha comenzado un despliegue programado en el Golfo de América, con el objetivo de apoyar las políticas de seguridad en la frontera sur de los Estados Unidos, como parte de las órdenes ejecutivas emitidas por el presidente Donald Trump. Este despliegue, anunciado por la Armada de EE.UU. el pasado sábado, subraya el compromiso de Estados Unidos para enfrentar desafíos marítimos, como el crimen transnacional, la inmigración ilegal y el tráfico de drogas.
Según el General Gregory Guillot, del Comando Norte de EE.UU., la misión del Gravely será crucial para reforzar la soberanía y la seguridad nacional, especialmente en el control de las aguas territoriales. El USS Gravely también se encargará de interceptar a los traficantes de drogas que operan en el mar, en colaboración con el Departamento de Seguridad Nacional y la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza. Esta operación está dirigida a llenar las brechas críticas en las capacidades de seguridad marítima.
Además, el aumento de la seguridad en la frontera terrestre ha llevado a un incremento en las embarcaciones de migrantes, especialmente cerca de la costa de San Diego, como lo indicó el Capitán de la Guardia Costera Jason Hagen. Los migrantes están optando por el mar como nueva vía para ingresar a Estados Unidos, lo que ha generado preocupaciones sobre la seguridad nacional. En este contexto, el USS Gravely jugará un papel esencial en el control de estas rutas.
